Antes de formar un árbol de Navidad con papel de periódico reciclado, se intentó con paraguas, también reciclados. (Sí: tenemos docenas de paraguas perdidos en conserjería.)

Pero no toda buena idea es fácil de plasmar en la práctica y, por más pruebas que hizo Mª Luisa, no fue posible elevar una estructura estable y estética: probó con sillas, con cuerdas, aros, escalera...
Al final tuvo que rendirse y pasar al plan B: los periódicos.

¿Lo intentará el próximo año?